Vivimos en la conciencia de separación, jugando a la víctima y el victimario.  La víctima y el victimario son dos polaridades de la misma información.

Creemos que cuando culpamos al “otro” nos liberamos pero es todo lo contrario. Ese “otro”, soy yo.  El “otro” es el efecto, la causa soy yo. Me hago cargo. Me hago responsable.

Somos energía y todo lo que nos pasa tiene que ver con nuestras proyecciones del inconsciente. Al primero que tengo que perdonar es a mí mismo y agradecer  por vivir esa situación,  por la enseñanza o aprendizaje que me produce.

¿Qué tengo que aprender de esta situación? ¿Para qué estoy viviendo esta experiencia? ¿Qué debo trascender?

Mientras yo me sienta víctima sigo guardando resentimiento y la única perjudicada soy yo.

El auténtico perdón deviene de una comprensión de la situación y esto   no significa justificar. Cuando perdonamos, soltamos y dejamos de repetir experiencias. Nuestra alma queda liberada.

María Graciela Corzo

Maestra de Reiki Usui - 2° Nivel Rainbow Reiki

Profesora de Yoga. Ipef - Iniciación todos los niveles Reiki Usui

Sesiones personalizadas. - Contacto 11 3109 4336

Instagram: viva más y mejor  - Indiasombrosa